Armando Berrones
Con el fraude que autoridades federales detectaron en agravio de la CFE por un monto
de mil 320 millones de pesos y que presuntamente involucra a unas 60 personas
de la Gerencia Divisional Noroeste y de las áreas centrales, el tema de los
próximos días será éste.
Se informa que de acuerdo con
las investigaciones realizadas por la Secretaría de la Función Pública, hay funcionarios
de la misma dependencia, jueces de Sinaloa y peritos externos, quienes venían
aprovechando su puesto y a contrapelo de la normatividad, se embolsaban fuertes
cantidades de dinero. Entre los delitos que se les imputan están ejercicio
indebido del servicio público y falsedad en declaraciones judiciales en
informes dados a una autoridad, por lo que podrían alcanzar una pena de hasta
12 años de cárcel.
La dependencia federal que
dio con estos vivales, menciona que agotará las instancias jurídicas para
procesarlos y con ello evitar que casos como éstos se repitan en un futuro.
MONOPOLIO ABUSIVO
A propósito, grandes y
airadas son las voces que reclaman a esta empresa paraestatal que amplíe el
subsidio en el consumo de energía, porque los cobros se han disparado
alarmantemente. Tan es así que muchos ciudadanos ya han salido a la calle a
protestar por las altas y abusivas tarifas y saben de antemano que las
autoridades de la CFE harán oídos sordos.
Ante esto, es urgente que se
legisle en la materia, que se cree una Comisión Reguladora de la dependencia a
través del Congreso de la Unión, para que exista transparencia en sus
operaciones, que se deje de privilegiar a las empresas españolas que se llevan
enormes ganancias, que se acaben las redes de corrupción y sobre todo, se
atienda al ciudadano, porque este monopolio poco a poco deteriora la vida de
los mexicanos.
Ojalá que el gobierno federal
actúe en consecuencia y escuche el clamor de los trabajadores y familias de
México.
AQUÍ NO HAY CULPABLES
El aún dirigente nacional del
PRI, Humberto Moreira se sigue defendiendo como gata boca arriba, pues ha dicho
en reiteradas ocasiones que él no tiene nada que ver en el caso de la falsificación
de documentos para obtener créditos en Coahuila por hasta 5 mil millones de
pesos, con sello y firma de la SHCP.
Expresa que “nada tuvo que ver
ni el entonces secretario de Hacienda y Crédito Público Ernesto Cordero ni
tampoco yo”. Y abunda: Es absurdo que se diga eso, “porque
los procedimientos, se llevan
a cabo en Palacio Nacional, y hay funcionarios que sí deben ser castigados”.
Uno de ellos es, de acuerdo con Milenio, Sergio Fuentes y también René Jiménez,
directores de deuda pública, el primero de Coahuila y el segundo de la SHCP.
O sea que el ex gobernador
coahuilense tiene las manos limpias, él no ha hecho nada que sea reprochable..
Válgame Dios!! Si todos sabemos que en su estado, cuando era el encargado de la
administración, no se movía una rama sin que él lo autorizara. A este
columnista le tocó comprobarlo. Era tal el dominio, que invitaba a quedarse
callado, porque si no, ibas a ser considerado enemigo del régimen. Recuerdo muy
bien, cómo sus propios compañeros burócratas hablaban maravillas de su estado,
del gobierno moreirista y todos lo tenían como un dios omnipresente. Me
gustaría saber ahora qué opinan?
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