Uno de los temas más
delicados y que por desgracia ha pasado inadvertido para muchos es,
indudablemente, la iniciativa propuesta por el presidente Felipe Calderón
para modificar el Código Federal de Procedimientos Penales a fin de que se
permitan las detenciones en caso de urgencia, y crear un sistema de
investigación contra la delincuencia organizada que acepta el cateo de
domicilios por denuncia anónima sin orden judicial, revisión y grabación de
personas, sus pertenencias y vehículos.
El aval del PRI y el PAN ya
está dado, ahora sólo resta esperar los tiempos para que se presenten
observaciones al dictamen que, según se advierte, se votará de manera íntegra.
De acuerdo con diversos
análisis, el dictamen expone también la justificación de la necesidad de la PGR
de tener agentes infiltrados en las filas del crimen organizado, sin que se
necesite para ello una orden judicial.
Asimismo, señala que la nueva
reglamentación empoderaría al Ejército y la Marina para que intervengan en la
persecución contra el crimen organizado.
Pero qué dice la normativa: Las
detenciones de urgencia se basan en el artículo 215 del nuevo código propuesto,
en el que se resalta que “sólo en casos urgentes” el MP podrá ordenar las
detenciones cuando el imputado incurra en delitos graves, exista riesgo fundado
que pueda escapar de la justicia, y por razón de la hora.
De todo ello se puede inferir
que de no ponerse un dique a tales acciones, en pocos años estaremos viviendo en un estado militar,
represivo de las garantías individuales, en aras de acabar con el crimen
organizado.
No se puede legitimar tal
aberración, antes bien, debe existir la sensatez, porque de lo contrario,
estaremos siendo testigos del advenimiento de la nueva Gestapo mexicana.
No habrá manera de contener
el poder del Estado y la violación de los derechos humanos estará permitida,
todo en aras de dar con los envenenadores de la juventud.
LARRAZABAL A LA CAMPAÑA
Finalmente, el CEN del PAN
decidió quitarle la candidatura plurinominal al alcalde de Monterrey, Fernando
Larrazábal, quien ahora tendrá su oportunidad de contender por una curul a
través de una campaña abierta.
En un comunicado, se señala
que “fue el propio Larrazabal quien voluntariamente ofreció declinar la
candidatura por la vía plurinominal para someterse al voto de los ciudadanos.”
Como recordará, amable
lector, la designación de Larrazábal como candidato desató la inconformidad de
los panistas de Nuevo León, ya que no podían aceptar que el alcalde regio se le
premiara de esa forma, cuando estaba en el epicentro de un escándalo de
corrupción, ya que su hermano Jonás fue grabado recibiendo dinero en efectivo
en casinos.
Qué tal, ehh?
¡Viva la democracia
chicharronera!!!