Las reglas
del juego político para el próximo año ya las puso el PRI el pasado sábado
durante la asamblea que se desarrolló en el Polyfórum Victoria. De ahí surgió
el método de Convención de Delegados para la designación de candidatos a
diputados en los 22 distritos electorales y en 19 municipios, estos últimos son
los más densamente poblados y estratégicos, veamos: Nuevo Laredo, Reynosa,
Matamoros, Victoria, Mante, Altamira, Tampico, Madero, Aldama, González, Gustavo
Díaz Ordaz, Hidalgo, Miguel Alemán, Miquihuana, Río Bravo, San Carlos, San
Fernando, San Nicolás y Valle Hermoso.
De lo
anterior se puede inferir que basados en la idea de la unidad y el respeto a
las formas partidistas todos los actores de la clase política deberán acatarlas
a fin de que se reposicione el tricolor en la entidad y evitar resueltamente otra
desastrosa derrota como la de este año. Sin embargo, Ramiro no la tendrá fácil
porque hay aristas en el asunto que le causarán malestares de cabeza
incontrolables.
Diría de
entrada que la posible alianza entre PAN-PRD será, de concretarse, una dura
prueba para el tricolor, porque los votos estarán demasiado divididos y en una
de esas, podría volver a sufrir una debacle, de ahí que sea de especial trascendencia
buscar una jugada maestra con el partido de la maestra Elba Esther Gordillo,
porque no se debe olvidar que en la anterior contienda, el PANAL le arrebató al PRI algo así como 100 mil votos.
Menudo
problema tiene frente así el líder estatal Ramiro Ramos, ya que a nivel
nacional, el actual secretario de Educación, Emilio Chuayfett comenzará con
firmeza su labor al impulsar la Reforma Educativa, la cual ya perfila que sus
alcances son nada agraciados para la dirigencia del SNTE.
De acuerdo
con los primeros indicios, prevé que incluya cambios en el artículo tercero de
la Constitución y a la Ley General de Educación, esto es,
serviría “para recuperar la rectoría del Estado
en el sector y darle impulso a un servicio civil de carrera que excluya al
Sindicato Nacional de Trabajadores de Educación”.
En otras
palabras, el sindicato deberá olvidarse de sus prácticas clientelares a placer,
pues se están estableciendo las bases para el Servicio Profesional de Carrera
Docente. lo cual quiere decir en cristianas palabras que habrá reglas claras y
precisas y todo aquel que aspire a ingresar, permanecer y ascender como
maestro, director o supervisor, lo haga con base en su trabajo y sus méritos,
garantizándoles plena estabilidad laboral.
Excelentes
lances, sólo falta ver que la aprueben y la reacción de la maestra, Gordillo
Morales.
¿Se acabarán
los cacicazgos?
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