Para el
mandatario estatal, Egidio Torre Cantú, los temas de la transparencia y la
rendición de cuentas son de suma importancia y por ello ha instruido a su
equipo a que se sume al esfuerzo de hacer claro el uso de los recursos
materiales y financieros con que se cuentan.
El secretario de Finanzas, Alfredo González
Fernández ha expresado que todas las
acciones que vayan encaminadas a lograr estos avances son bien recibidas; sin
embargo para algunos esas tendencias políticas no van con ellos y
constantemente omiten sus deberes constitucionales.
Se trata de
alcalde de Nuevo Laredo, Benjamín Galván Gómez y la edil del puerto de Tampico,
Magdalena Peraza Guerra, quienes, de acuerdo con el Instituto de Transparencia
y Acceso a la Información de Tamaulipas(ITAI) no han cumplido con las
solicitudes de información presentadas por ciudadanos que han resultado perjudicados.
Señala el
ITAI que es necesario que se respete la ley en cuanto a las peticiones de
información pública, porque en caso contrario, como sucede, se vulnera el
derecho de los ciudadanos a estar informado de lo que gasta y compra el
gobierno.
Pese a que
el Congreso estatal también ha insistido y conminado a todos los alcaldes a
cumplir con este ordenamiento, todavía no se integran a la nueva cultura de la
pulcritud, las manos limpias y anticorrupción.
Benjamín
Galván Gómez aparece como uno de los ejemplos más criticables, porque no quiere
ventilar sus acciones, como si fueran secretos de Estado o altamente confidenciales.
En cuanto a la alcaldesa de Tampico, se le ha requerido información que no
ofrece, no obstante, a través de la tenaz insistencia al ITAI, se ha logrado
someter sus datos a un proceso de revisión contemplado en la ley para
determinar el uso y en su caso, abuso que se haga en torno al erario.
Bien dicen, que un código de ética
firme debe ser tan confiable como una brújula, no cree? ¿Los tamaulipecos contaremos con políticos con esa admirable
ética? Yo lo dudo mucho.
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