Ayer
comentaba en este espacio que la polarización política que priva en la entidad,
derivada de la acometida de muchos suspirantes a cargos de elección popular,
iba en aumento, dados los intercambios de acusaciones entre las distintas
fuerzas partidistas.
La petición de salida de los delegados
federales de Tamaulipas por parte del PRI despertó el encono de los
interfectos, quienes ni tardos ni perezosos levantaron la voz para acallar los
ecos del tricolor y dejar en claro que nadie tiene que arrogarse el derecho de
exigir el desempleo de los delagados y peor aún, por caprichos de una camarilla
política. Sin embargo, ayer el diputado
local panista, Manglio Murillo dijo que
el trabajo de muchos delegados federales no ha sido bueno y
consecuentemente debieran meditar sobre sus aspiraciones políticas, ya que la
gente, los ciudadanos lo podrán notar y en las urnas no se les apoyará en lo
absoluto.
El
legislador dio nombres: Roberto Schuldes Dávila, de la Comisión Nacional del
Agua, Elba Valles Olvera, de la Secretaría de la Reforma Agraria, César Guerra
Montalvo, del programa de Oportunidades y Jorge Alejandro Díaz Casillas,
titular de la CORETT.
Habría que
ver cuál es la versión de los evaluados por el diputado, porque sin duda que
desdeñarán su declaración que hizo a la prensa. He aquí sus palabras:
“En
política, cuando se ha ocupado un cargo público, como es el caso de los
delegados, la mejor carta de recomendación es el trabajo realizado pero en esta
ocasión, el desempeño no fue bueno”, dijo.
Consideró el
diputado que sin falta de trabajo social se puede advertir de lejos, por lo que
estimó que el PAN no la tendrá fácil en los comicios del 7 de julio del 2013.
ALUVIÓN
El
presidente electo Enrique Peña Nieto está de ya configurando lo que será su
administración, y dentro de los cambios, creará la Comisión Nacional
Anticorrupción, sustituyendo con ello a
la secretaría de la Función Pública. Interesante el punto, sólo basta saber
quiénes integrarán esa comisión, porque si son los mismos de siempre, qué
chiste tendrá?
En otro
tema, su partido, el PRI, está preparando un plan de rescate para las pavorosas
deudas públicas que tienen los estados del
país.
La idea es
sanear las finanzas, ya que los niveles de endeudamiento son altamente
peligrosos y no quiere recibir una Nación en bancarrota y sin posibilidades de
maniobra . Urgen soluciones de fondo y sobre todo, una férrea disciplina en el
manejo de los recursos públicos.
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