LEGITIMIDAD POLÍTICA

 

PARTEAGUAS

Armando Berrones

En mi anterior columna puse de relieve los elementos sine qua non que deberían tener los actores políticos en el ejercicio del poder, utilizando para ello la precisión quirúrgica del filósofo español: Fernando Savater. A manera de recuento son 3: la diligencia, competencia y la transparencia.  Añado otros como la llamada legalidad y legitimidad, los cuales son de capital importancia para dirigir y encabezar acciones que modifiquen los destinos de los grupos relacionales y sociales a los que se pertenece. En este tenor, quiero hacer una ponderación sobre la política enfocada en atender los reclamos apremiantes de los representados y en particular, señalar que en el sur de Tamaulipas hay 2 alcaldes que tienen en común algo de lo mencionado líneas arriba. Para empezar, Adrián Oseguera, edil maderense que ha sabido internalizar las demandas de los ciudadanos y mejor aún, ha dado solución real a ellas. Decía Aristóteles, “Nosotros somos lo que repetidamente hacemos”, esto es, el munícipe ha convencido por su legalidad, legitimidad, pero sobre todo, por su trabajo comunitario. La resolución expedita y carente de reflectores ha sido determinante para ser valorado como uno de los políticos más interesantes, codiciables y dignos para la búsqueda de la gubernatura. Explico, legalidad por el ejercicio supremo de la aplicación de la ley y legitimidad, porque los ciudadanos le concedieron una nueva oportunidad de servirles al obtener la reelección. A mayor precisión, en la elección de junio, obtuvo más de 50 mil votos, algo histórico para una contienda municipal.

Esto lo digo so riesgo de ser motejado de palero, sin embargo, la realidad es inamovible, los resultados son evidentes y nada tiene que ver el criterio político. El mejor juez: la sociedad de Madero, aunque eso no supone que sea un santo apóstol, me queda claro que en la política no existen y tampoco las Madres Teresa de Calcuta con el debido respeto que me merecen.

Por el lado del PAN, en el municipio hermano, Tampico, el edil Jesús Nader también logró posicionarse como prospecto excelente a la gubernatura que estará en juego el próximo año, al refrendar su mandato por otros 3 años en la administración municipal. A diferencia de Oseguera, Nader lo siguen los fantasmas del pasado, las acusaciones del desfalco que nunca aclaró ocurrido en el IMSS durante su paso por la delegación estatal y que el Senado de la República a la sazón hizo un reclamo nacional pidiendo su inmediata remoción, pues destacó  un quebranto de más de 35 millones de pesos en contra de la dependencia.  Aunado a esto también tiene acusaciones de compadrazgo y de beneficiar a sus adláteres en la comuna con jugosos negocios al amparo del poder. Valga destacar que existe la empresa perfiles de fierro y lámina Atiye S.A de C.V, única proveedora de la materia prima para la elaboración de cientos de contenedores de basura, que recibió contrato para crear los depósitos de desechos, resultando agraciado presuntamente Ernesto Atiye, quien es esposo de Ivonne Nader, su hermana.

Dicho lo anterior, sin embargo, hay que precisar que ganó la reelección y eso nadie lo puede evadir ni menospreciar. Ahí están los resultados. 

Reafirmo: estos dos personajes tienen potencial para buscar la gubernatura el próximo año y no hay que perderlos de vista. Uno, por Morena y rl otro, por Acción Nacional. Veremos qué estrategias utilizan en su camino para la grande en el 2022.

 

@ArmandoBerrones