Releyendo el
Decálogo de la propaganda Nazi, aquella que maquiavélicamente ideó y propaló el
político y ministro de la Alemania nacionalsocialista, Paul Joseph Goebbels,
quiero reproducir 2 de sus principios fundamentales, a los cuales comúnmente se
recurre para justificar lo injustificable.
En esta
ocasión, los emparentaré con un tema toral: el desempleo, que sigue afectando a
un buen número de conciudadanos. Es de dominio público el nada agradable tercer
lugar en la materia que ocupa Tamaulipas… más lo que falta.
De acuerdo al
INEGI, nuestra entidad terminó el año 2013 en el tercer sitio y mantuvo la
misma tasa comparada con el año anterior. Fue, eso sí, superado por Querétaro y
Tabasco.
Pero, bueno,
diré que el primer elemento es el Principio de la Transposición, esto es, básicamente “si no puedes negar las malas
noticias, inventa otras que las distraigan”. En otros términos, que los
funcionarios encargados del asunto, la secretaria de Desarrollo Económico y
Turismo, Mónica González, debe de estar buscando la forma de aminorar la
situación, dando informaciones alternas de supuestos avances, de un gran
portafolio de negocios, de inversión extranjera y demás zarandajas; no
obstante, la población vive en la pignorante necesidad de ganar el sustento
para llevarlo a casa, sin las condiciones apropiadas para ello.
No se vale
decir que de estar en el primer lugar a nivel nacional, ya se logró un tercero,
no, claro que no, se trata de que el Estado no aparezca entre los feítos, si no
entre los mejores, desarrollados y progresistas. Nada que esperar.
El segundo
Principio se le denomina la Silenciación
y equivale a acallar las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y
disimular las noticias que favorecen al adversario, contando ex profeso con los
medios de comunicación afines. Respecto
a esto no hay mucho que abundar, me queda claro que echan a andar la maquinaria
venal, periodística para contrarrestar los temas espinosos a cambio de dádivas que
eventualmente resultan contraproducentes en una negociación.
Conviene
decir para documentar el optimismo de los detentadores del poder político
estatal, a nivel nacional las cosas no están muy bien que digamos. Veamos:
la creación de empleo formal se desplomó
un 50% en enero del 2014, en relación al mismo mes del año anterior. Los
especialistas en el rubro argumentan que este panorama obedece a los cambios
fiscales, a que las empresas optaron por no contratar personal o decidieron reducir
plazas para evitar mayores costos. La pregunta que se hace el que emborrona
estas cuartillas es ¿para qué sirve el nuevo esquema de fiscalización, si en
lugar de incentivar a las empresas, las apachurra? Ahh y por cierto …¿a qué
mentecato se le ocurrió cobrarle impuestos hasta los pepenadores y empresas
recolectoras? Y es que la evasión de impuestos es el deporte favorito que
practican los grandes corporativos y magnates de la industria en México. ¿Hay
que cobrarles a todos los que están en el Robaproa, no?. Termino con otra perla
informativa difundida hoy en la prensa nacional:
Índice de
confianza económica cayó 12.5% anual en enero, por lo que para el presidente
del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, Ernesto O´Farrill, esta
situación se debe a factores como la inseguridad y la desaceleración de algunos
sectores de Estados Unidos.
"Marcamos
una percepción negativa en el clima de los negocios en enero, que bien se puede
atribuir a los efectos en el consumo y en la actividad productiva de la Reforma
Fiscal, combinada con una marcada desaceleración que presenta la industria
manufacturera en Estados Unidos", dijo.
Abundó que la
expectativa sobre la situación futura (dentro de seis meses) también arrojó
cambios descendentes, pues los resultados mostraron 74.00 puntos, contra 76.21
en el mes anterior, es decir, una disminución de 2.21 puntos. Es decir, amigo
lector, debemos pertrecharnos porque el vendaval se acerca, nadie cree en el
ejercicio gubernamental, en la buena marcha del país. Botones, aquí están.
@ArmandoBerrones
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